México by Patagonia Argentina

México by Patagonia Argentina

Por: Sergio «Roco» Valdez | Instagram: @seraventuranorte

Una vez más la Patagonia seduce a potenciales visitantes de todo el mundo y Arturo Pascaccio Figueroa no fue la excepción, porque uno de los sueños de su vida era recorrer la Patagonia y su empresa World Motour eligió nuestro sur argentino. 

¡El resultado no podría haber sido más satisfactorio en este viaje… que todo motoquero sueña recorrer!      

Antes de comenzar nuestro viaje, la cita fue en Buenos Aires para reunirnos y disfrutar de lo mucho que tiene para ofrecer esta hermosa ciudad. Un city tour, un buen bife y un show de tango fueron la bienvenida perfecta.

Al otro día volamos a San Martín de los Andes y, tras recibir nuestras motos, comenzó de inmediato nuestra travesía.                                                                  

Fueron decenas de experiencias vividas cruzando la mítica ruta 40 con sus rectas interminables, cielos espectaculares y atardeceres invernales a las 10 de la noche que simplemente te dejan sin aliento. También mucho camino en tierra, o ripio como le dicen nuestros amigos argentinos, que son sin duda los kilómetros más exigentes (no por nada a un tramo le llaman los 72 km infernales), súper desgastantes físicamente… tanto que estuvimos a punto de tirar la toalla después de algunas caídas leves, que afortunadamente no pasaron a mayores. Por supuesto, también nos tocaron todos los climas, calor en desierto y estepa, donde por cierto casi atropello a uno de los cientos de guanacos que vimos cruzando la carretera. También hubo temperaturas bajo cero con nevadas y ventiscas en el punto más alto de los Andes, en el paso Garibaldi, que hasta tiró una moto estacionada… y, por supuesto, los vientos patagónicos de más de 70 km por hora que nos acompañaron en gran parte de la ruta y nos hacían luchar todo el tiempo para mantenernos en un carril. Después de todo esto, al final del día siempre esperábamos con ansia llegar a la mejor parte, celebrar un día más de ruta con gastronomía de primera, entre lo más memorable, el cordero patagónico, la pizza fugazzeta, el ojo de bife, la centolla, acompañados con buenos vinos y, por supuesto, chocolate, helados y dulce de leche, ¡el producto nacional por excelencia!

Fueron más de 3.000 km, 4 fronteras entre Chile y Argentina, con los paisajes más increíbles y diversos que he visto, para cumplir un sueño personal y un sueño colectivo de los bikers del mundo, un viaje del alma que siempre atesoraré.

Gracias a todos los pilotos y gracias a World Motour que se unió a este desafío que significa la semilla de muchos viajes más alrededor del mundo.  Nunca olvidaremos nuestro viaje por la Patagonia, donde comenzamos siendo perfectos desconocidos antes de rodar y amigos del alma al llegar a Ushuaia.

En el mismo sendero: