Por Rosana Gumilla IG @rosanagumilla
“Conectate con tu mejor versión”… cuando hablamos de esto ¿qué significa? El famoso “yo soy así y al que le guste bien y al que no…” sería muy radical, pero lo importante aquí es que te gustes a vos mismo. Cuando tu corazón empieza a expresar algo que hay que cambiar, te digo que el AMOR es el antídoto al sufrimiento, el amor todo lo puede, todo lo cura… Hay varios amores; el primero y más importe es el amor a uno, el amor propio, el aceptase tal cual en el plano físico, mental y emocional. Todos están relacionados; si no me acepto físicamente, voy a boicotearme constantemente y mi inestabilidad emocional estará a flor de piel… A temprana edad es importante lo que nos dicen nuestros padres, es cuando todo queda marcado y depende de esa etapa cómo será tu vida. Si te alentaron, te apoyaron y te dieron mucho amor, seguramente tendrás tu autoestima elevada; si al contrario te criticaron o desvalorizaron, tu vida será una constante de inseguridades y errores; no quiere decir que haya excepciones por haber encontrado una luz, un ángel en el camino que dejaste guiar y darte cuenta de lo valioso que sos y de que la vida vale la pena caminarla.
Conectarse con la mejor versión de uno mismo es sanar desde adentro para cambiar lo que se ve afuera. Aprender a aceptarse no es fácil y ver las oscuridades de frente, menos. Pero ahí están el AMOR que todo lo cura y el perdón; sí, sí, el perdón; perdonar a los padres porque ellos hicieron lo mejor que podían, ¡y después a uno mismo! ¡Te aseguro que es liberador!
¡Comenzarás a ver con los ojos del corazón al conectarte con tu mejor versión!
Después está el amor a los demás (a los padres, hijos, amigos, colegas) y, si estás conectado con vos mismo, este amor va a fluir, con las situaciones conflictivas, desacuerdos y hasta peleas, pero será desde el plano del amor sin prejuicios de tu parte; entenderás al otro y así lo aceptarás.
Otro amor es el de pareja, que es la compañía, el acompañamiento, el oído, el hombro, la risa, el llanto, ¡pero desde la admiración y el respeto! ¡No es el complemento de nada porque uno ya es completo! No es el sostén porque tu corazón y tu valentía te sostienen; no es la prolongación porque somos la unidad, la chispa sagrada de Dios o el Universo o la Divinidad (lo que sientas).
Como ves, lo IMPORTANTE es encontrar tu mejor versión y ¡así encontrar tu FELICIDAD!
¡Todo está en vos!