Por Guillo Solá y Rodri Saravia Toledo
De nuestro paso como estudiantes por Buenos Aires, entre tantas cosas buenas, nos trajimos la experiencia de haber jugado torneos de fútbol amateur. Por condiciones naturales y recursos, los campos de deporte de las afueras de Buenos Aires siempre fueron algo envidiable.
Tachábamos los días del calendario esperando el sábado, para poder por un rato colgar el traje o la mochila con libros, salir del cemento, y viajar 60 kilómetros para pisar el verde césped. Ahí se juntaba la banda; algunos ya iban acompañados con sus novias botineras, que con el tiempo se transformarían en sus mujeres. Más tarde, bajarían del auto cargando además del bolso, los primeros cochecitos. Cada sábado era una fiesta, más allá del resultado del partido.
En esos años empezaría a crecer también el fútbol femenino. Eso fue cambiando el ambiente. Apareció una raza nueva, los botineros, y los afters, con el color de la música, los Djs y las bandas en vivo.
Extrañando un poco todo eso, surge la idea de Tucán Club.
EL CONCEPTO
El Tucán nace hace 4 años, en conjunto con Proyecto Norte, como un espacio pensado para eventos sociales, empresariales y deportivos, con la idea de darle más desarrollo a la zona de San Lorenzo Chico y de generar un espacio para recreación.
Fiel a su costumbre, las ideas de Proyecto Norte volaron un poco más allá, desarrollando un lugar arbolado con lagunas, un club house y estacionamiento, superando las expectativas que teníamos.
En estos años de vida, hemos tenido eventos empresariales, capacitaciones y eventos sociales de todo tipo. El más reciente para destacar fue la visita de Roberto Canessa, sobreviviente de la tragedia de los Andes, en una charla para un grupo de 80 personas acompañada de buenos vinos, cazuelas y empanadas.
EL TORNEO
Volviendo al fútbol….
Nos propusimos juntar las partes y sumamos al Torneo Amigos del Norte.
Fuimos aprendiendo junto a los chicos del Torneo, siempre valorando y ayudando a fomentar el espíritu de amistad que forma parte de su ADN, más allá de la competencia en sí.
El torneo fue creciendo y mejorando. Se sumaron sponsors con marcas importantes como Cerveza Salta, Cerveza Imperial y OSDE.
Al torneo de varones se sumó el de chicas, que duplicó la cantidad de equipos en dos años. Es increíble ver la evolución que han tenido. Aparecieron muchas jugadoras; algunas de ellas abandonando la clase de pilates, se animaron a ponerse los botines. Sin lugar a dudas, hoy el nivel de fanatismo de las mujeres mide por encima de los hombres.
Pero el torneo hoy se juega también en las redes. Están los “clubes” de Instragram de cada equipo. En las redes se presentan los planteles, se anuncian los pases del año, se plantean los desafíos entre equipos, se postean fotos del tercer tiempo, y sobre todo abundan las gastadas a los “rivales” más clásicos. El ritual de los sábados termina siempre con unas cervecitas en el bar, mientras empiezan a caer los extra torneo a cerrar la tarde. Y cuando el día amerita, se arma el after con DJs y bandas.

La escuelita de futbol
Durante la semana se sumó la escuelita de fútbol de Tucán, a cargo de Marianito Maino. Todos los Martes y Jueves bajan de los autos más de 100 chicos vistiendo la camiseta de Tucán, o de alguno de sus ídolos, para divertirse jugando al fútbol, aprendiendo técnicas nuevas, potenciando habilidades, haciendo amigos y preparándose para competir los fines de semana. Mariano, Fabio y los chicos de la escuelita hacen un trabajo espectacular fomentando el deporte y la amistad entre esos chicos.

«El jardincito»
De lunes a viernes funciona el Jardín de Infantes de la Negrita Guerineau.
Nos pone muy contentos ver que todos los que pisan Tucán lo hacen para pasar un buen rato. Y mirando para atrás, sentimos la satisfacción de haber puesto esta idea a funcionar. Es mérito principalmente de todos los que se fueron sumando a las actividades y que comparten el mismo espíritu, haber logrado el concepto que imaginamos, aún sabiendo que todavía hay mucho por aprender y por mejorar.